Los niños experimentan celos debido a la competencia por el amor y la atención de sus padres. Según la psicóloga infantil Marcela Gandini, el objetivo de los celos es “obtener una mayor cantidad de atención de los padres, a través de la amenaza de alejamiento o exclusión”. Por lo general, el niño que tiene celos se siente inseguro y amenazado por el hermano o hermana que está recibiendo más atención.
Los niños sienten celos porque quieren atención y no quieren que otros niños se la lleven.
¿Qué hacer cuando un niño se siente celoso?
Cuando un niño se siente celoso, es importante que los padres estén atentos a su comportamiento y lo ayuden a entender y a manejar sus emociones. Es normal que un niño se sienta celoso cuando tiene hermanos, cuando ve que sus amigos tienen más cosas que él o cuando tiene que compartir a su madre o a su padre con otros niños.
Los padres pueden ayudar a su hijo a entender sus sentimientos de celos. Pueden hablar con él sobre lo que está sintiendo y explicarle que todos los niños sienten celos en algún momento. Los padres también pueden ayudar a su hijo a pensar en maneras de lidiar con sus celos. Pueden hablar sobre cómo pueden resolver los problemas que surgen cuando el niño se siente celoso.
Los padres también pueden ayudar a su hijo a expresar sus sentimientos. Pueden animarlo a hablar sobre lo que está pasando en su vida y sobre cómo se siente. Los padres pueden ayudar a su hijo a construir una buena relación con sus hermanos y con otros niños. Pueden ayudarlo a aprender a compartir y a cooperar.
¿Cuáles son los síntomas de un niño celoso?
Los celos son un sentimiento que puede aparecer en cualquier momento de la vida, y que tiene que ver con la inseguridad y la amenaza a la autoestima. En los niños, estos sentimientos pueden estar asociados a la rivalidad por el amor y la atención de los padres, o a la necesidad de proteger su territorio.
Los síntomas de los celos en los niños pueden ser muy variados y dependen de la personalidad de cada uno. Algunos niños se vuelven agresivos y manipuladores, mientras que otros pueden mostrar una actitud pasiva o introvertida. Sin embargo, hay unos síntomas que son comunes a todos los niños celosos, y que los padres deben tener en cuenta:
– Inseguridad y autoestima baja.
– Dificultad para aceptar que otros niños tengan mejores cosas que él.
– Reactividad ante cualquier situación en la que se sienta amenazado.
– Tendencia a la competitividad.
– Celos excesivos hacia los padres.
– Tendencia a la exclusión de otros niños.
¿Por qué los niños celan a sus padres?
Los niños celan a sus padres porque quieren sentirse protegidos y queridos. Necesitan saber que están siendo cuidados y que sus padres están pendientes de ellos. Además, el celar a los padres les permite establecer una relación de poder en la que ellos son los que mandan.
¿Cómo controlar los celos en los niños?
Los celos son un sentimiento natural en los niños, que pueden experimentar ante cualquier situación que consideren amenazante para su relación con las personas que quieren. Sin embargo, es importante que aprendan a controlar estos sentimientos, para que no interfieran en sus relaciones y para que no sean víctimas de ellos mismos.
Para ayudar a los niños a controlar los celos, es importante que se les enseñe a reconocer cuándo están sintiendo celos, para que puedan analizar la situación y tomar medidas para resolver el problema. También es importante que se les enseñe a expresar sus sentimientos de forma constructiva, de modo que puedan comunicarse con las personas que quieren de forma positiva.
Por último, es importante que se fomente la confianza en los niños, para que se sientan seguros de sí mismos y no necesiten la aprobación de los demás para sentirse bien. La confianza les permitirá relacionarse con las demás personas de forma sana y constructiva, sin celos.
Los niños sienten celos porque se sienten amenazados por la presencia de otros niños en su entorno. Esta amenaza puede provenir de la competencia por la atención de los padres, la posibilidad de perder el amor de los padres o la amenaza de ser rechazados.
Los niños sienten celos porque quieren que les presten atención y no la están recibiendo, o porque tienen miedo de que alguien le robe el amor de sus padres.