No importa con quien interactuemos, ya sea amigos, amantes, profesores o jefes, naturalmente queremos que les gustemos. Si no somos naturalmente relajados y carismáticos, esto puede resultar un poco difícil y provocar ansiedad.
Afortunadamente, la investigación y la psicología nos han proporcionado algunos consejos y trucos que pueden aumentar nuestras posibilidades de formar relaciones significativas y satisfactorias con quienes nos rodean.
¿Quieres probar algunos de ellos? Sigue leyendo para descubrir cuáles son.
El efecto pratfall
Cuando intentamos ser queridos por los demás, a menudo buscamos la perfección. Tememos mostrar cualquier defecto frente a los demás porque creemos que pensarán mal de nosotros. Pero, ¿es eso realmente cierto? Resulta que no.
En 1966, el psicólogo Elliot Aronson y sus colegas investigaron si cometer errores aumentaba la simpatía. Los participantes escucharon una grabación de un actor que pretendía ser un concursante en un concurso. En un grupo de participantes, el actor fue presentado como muy conocedor, respondiendo casi todas las preguntas correctamente. Más tarde, la mitad de las grabaciones mostraron al actor conocedor derramando su café y disculpándose.
Los investigadores se preguntaron: ¿a quién le gustarán más, a una persona inteligente torpe o a una persona inteligente no torpe? Los resultados mostraron que una persona inteligente torpe era percibida como más simpática. A esto se le llamó el efecto pratfall, la tendencia de la atracción interpersonal a cambiar después de que alguien comete un error.
Esto puede suceder porque si alguien te ve como altamente competente, puede sentirse inferior en tu presencia. Los errores y mostrar tu humanidad hace que la gente sienta que estás en el mismo nivel que ellos y les caigas mejor. Así que no necesitas buscar la perfección, simplemente sé tú mismo.
Tener actitudes similares
¿Qué te gusta más, las personas que comparten tus puntos de vista o las personas que están en desacuerdo contigo en casi todo? Según la investigación realizada por psicólogos sociales, probablemente te gusten más las personas que son más similares a ti.
En un estudio clásico de 1961 publicado en el Journal of Abnormal and Social Psychology, se encontró que tener actitudes similares aumentaba la simpatía. Los psicólogos creen que se siente recompensador cuando alguien está de acuerdo con tu percepción de las cosas, y este sentimiento refuerza la simpatía mutua.
Cuanto más estén de acuerdo, más les caerán bien. Así que aprovecha estos resultados, trata de descubrir todo lo que puedas sobre las personas con las que hablas y concéntrate en las cosas que tienen en común. ¿A ambos les gusta escuchar música pop indie? ¿Comparten la misma pasión por odiar la piña en la pizza? ¿Quizás a ambos les parece muy importante crear conciencia sobre los problemas medioambientales?
Sea lo que sea, tan pronto como encuentres las similitudes, haz hincapié en ellas y anímalos a hablar más sobre eso. Asegúrate de decir frases como «estoy totalmente de acuerdo» durante la conversación. Seguro que disfrutarán mucho de esa conversación.
Compartir secretos
Compartir actitudes es una cosa, pero ¿qué pasa con compartir secretos? Mientras que algunas personas son más privadas y reservadas, a otras les encanta la emoción de tener un secreto.
Tal vez compartas ese momento en el que te caíste por las escaleras frente a tu enamorado/a, o que todavía sigues viendo en secreto a Bob Esponja. Les estás mostrando un lado de ti que no se ve usualmente por los demás. Según la teoría psicológica de la auto-revelación, puedes beneficiarte de abrirte.
Por ejemplo, un estudio de 2017 publicado en Computers in Human Behavior sugiere que mostrar vulnerabilidad y ser abierto acerca de tus pensamientos, sentimientos, esperanzas y sueños aumenta la sensación de familiaridad y cercanía entre tú y la otra persona.
Puede que se sientan especiales porque elegiste compartir el secreto con ellos, y también les envía el mensaje de que confías en ellos. Así que, si quieres que alguien te caiga bien, no tengas miedo de mostrar una parte más profunda de ti mismo.
Anticipar una interacción futura
En 1967, psicólogos de la Universidad de Minnesota realizaron un experimento. Les dieron a los participantes información ambigua sobre dos mujeres y les dijeron que pronto tendrían una conversación personal con una de esas mujeres. Más tarde, les preguntaron a los participantes cuánto les gustaba cada una de las mujeres basándose en la información que recibieron.
Los resultados mostraron que los participantes mostraron preferencia por la mujer con la que se suponía que iban a interactuar en el futuro. Estos hallazgos llevaron a los psicólogos a creer que anticipar una interacción con alguien aumenta la atracción. Así que, para asegurarte de que a las personas les gustes, piensa en algunas situaciones en las que volverán a verte y asegúrate de hacérselo saber.
Puedes decir algo como «nos vemos mañana» o «también iré a esa fiesta, podemos pasar el rato allí». Debido a que esperarán volver a verte, es posible que les caigas un poco mejor.
Estos son solo algunos de los consejos y trucos psicológicos que pueden ayudarte a hacer amigos y parecer más agradable. Si pruebas alguno de ellos, déjanos saber cómo te fue en los comentarios.