¿Alguna vez te han dicho o hecho algo que te molestó tanto que te quedaste sin palabras? Se trata de esas cosas que no son simplemente ser directo o decir cosas enojado, sino aquellas que no tienen otro propósito más que lastimar y menospreciar a los demás. Enfrentarse a personas desagradables puede ser un reto, pero hay formas de manejar la situación con gracia.
Desafortunadamente, no tenemos el Guantelete del Infinito para convertirlos en personas amables, ¿entonces qué debes hacer? Tranquilo, estamos aquí para ayudarte con algunas respuestas que podrían ayudar a apaciguar esa chispa de maldad.
Respuestas para Lidiar con Personas Malintencionadas
Afrontar comentarios de personas malintencionadas requiere tacto y firmeza. Aquí te ofrecemos algunas respuestas clave para mantener tu compostura y demostrar que no te afectan sus palabras.
1. Parece que estás molesto, ¿está todo bien?
¿Qué hacer con el fuego? Apagarlo después de hacer malvaviscos, por supuesto. A veces, la maldad es como el fuego, arde sin control y lastima a cualquiera que se acerque. Incluso si no respondes con malicia, los estudios muestran que las interacciones continuas con personas desagradables aumentan la rudeza de la otra parte. Esta frase actúa como una manta de fuego que desalienta su propagación. Obliga a la otra persona a hacer una pausa y reflexionar, mostrando que estás escuchando y te importa, no te dejas llevar por el infierno.
2. Comencemos esta conversación de nuevo
Este es el punto donde la conversación comenzó áspera y se convirtió en una zona de batalla casi incoherente enojada. Muchas veces, esto ocurre porque las emociones crecen hasta que ambas partes pierden empatía. Todo lo que pueden ver es que no estás considerando su punto de vista. Al usar personas desagradables frases como esta, puedes redirigir la conversación hacia un terreno más neutral y productivo.
En el calor del momento, olvidamos que mis sentimientos son válidos y que los suyos también lo son. Esta frase ayuda a comunicar que todo pudo haber comenzado con un malentendido y que estás abierto a un nuevo punto de vista.
3. No permito que nadie me hable así
Esto se trata de respetarte a ti mismo y a los límites que has establecido. Nadie más tiene el derecho de cambiar eso o pisotearlo. Algunas personas desagradables intentarán desafiarte, lo que puedes reconocer en comentarios que te rebajan y te pintan como inferior.
No estás obligado a dejar que dicten tu validez. Esta frase les dice que sabes quién eres y que usar tu dolor para fortalecerse a sí mismos no es su derecho ni es aceptable. Si la persona sigue siendo malvada sin mostrar señales de crecimiento, tienes el derecho de alejarte. No necesitas ese ruido.
4. Tomemos unos minutos para calmarnos antes de que empeoremos y volvamos a ello más tarde
Puedes reformular esta frase de varias maneras, pero esencialmente estás diciendo que has notado que este no es el camino que deseas seguir y que la mejor discusión se estaba llevando a cabo antes. Esta frase funciona como el botón de reinicio para que puedas regresar al punto anterior en el que la conversación se convirtió en una pelea, pero aún conserves todo el progreso que hiciste durante la parte tranquila de la conversación.
Por supuesto, enfocarse en ti mismo, por ejemplo, «Estoy sintiendo muchas emociones y necesito calmarme» puede funcionar mejor, mostrando que eres consciente de ti mismo y te preocupas por los demás, no solo por imponer tu punto.
5. Necesitas reevaluar la forma en que te diriges a la gente
Cuando la persona grosera o malintencionada claramente se pasa de la raya, o si te preguntan directamente por qué la gente reacciona así a ellos, tienes que tener cuidado con las palabras que eliges. Decir «necesitas» puede sonar como una orden y desencadenar una respuesta defensiva, incluso si no eres el objetivo. Si solo se dedican a esparcir veneno sobre todos los demás, esta frase, aunque sea cierta, puede no ser bien recibida si no están listos para escucharla.
Por otro lado, definitivamente puede ayudar a comprender por qué son como son y cuál es la razón detrás. Tal vez tengan una mini epifanía de «nunca supe que daba esa impresión» o podrían aferrarse a su posición y afirmar que todos los demás son el problema y luego comenzar a insultarte. En un giro raro, es posible que descubras una situación en la que la persona no está siendo mala, sino que está siendo acosada y manipulada por aquellos de quienes se ha quejado.
Las personas malintencionadas existen, pero no todas son iguales. Cada una de estas frases le brinda a la persona la oportunidad de mostrarte quiénes son realmente: ¿son inconscientes de cómo suenan o hay una historia más profunda que solo ves la punta del iceberg?
También existen aquellos que son incapaces de ser corteses porque carecen de capacidad para preocuparse por los demás y asumir la responsabilidad de sus acciones. Eso no es tu responsabilidad ni tu problema; después de haber hecho todo lo posible para darles una oportunidad, tienes luz verde para alejarte. No tienen derecho a alimentarse de ti. Y cuando todos los demás hacen lo mismo, lo único que podemos hacer es esperar que la persona malintencionada reciba un llamado de atención.
¿Qué tipo de personas desagradables has encontrado? ¿Cómo ha cambiado tu experiencia con el tiempo? Si has intentado respuestas similares, ¿qué pasó? Por favor, comenta y discute. Al compartir tus experiencias y personas desagradables frases que has empleado, podrías ayudar a otros a manejar mejor estas situaciones.